El acero inoxidable puede sufrir contaminación externa, ya sea en el momento de su instalación por el contacto con las herramientas o por contacto con partes externas. (Arpones, anclas, plomadas de pesca, etc …)
Esto hace que las piezas de acero inoxidable requieren mantenimiento y limpieza permanentemente.
Es muy común que las piezas de acero inoxidable “lloren” óxido. Esto ocurre porque la aleación es de baja calidad o por la contaminación por agentes externos.
Para realizar el mantenimiento correctivo de las piezas siga las instrucciones:
1– Después de su uso en un entorno marino, se lavan las partes con agua dulce y jabón.
2– De vez en cuando (1 mes) limpie las piezas con productos específicos disponibles en el mercado para la limpieza de metales, por ejemplo. SILVO.
3– Permanentemente pase una franela con vaselina o silicona en las piezas, esto mantendrá una película protectora sobre el acero inoxidable.